¿Qué pasaría
si Tay Tay hubiera nacido en Filipinas y hubiera tomado clases de canto?
Se llamaría Max Ayeza y habría lanzado esta rola llena de sintes, y beats electropop. Melodía coqueta y rítmica, voces dobles y comprimidas más una letra cien por ciento romántica. Los acordes de piano dirigen esta pieza, redondeados por un arpegio de sintetizador que añade dinamismo y ayuda a distinguir competentemente una sección de otra. El sonido es moderno y completamente enfocado a las producciones angelinas de los últimos años.
Quizá, irónicamente, el hook sea la parte más floja del tema. Que, ojo, no significa que sea malo. Al parecer el carácter relajado y downtempo fue el objetivo al momento de dar vida a la canción en el estudio. A nivel musical y de producción, perfectamente podría ser atribuida a Ariana Grande, Taylor Swift, Billie Eilish o a cualquier otra cantante de pop ultra popular actual.
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