Directamente desde Rumania llega esta gran Maddie, que ha llegado a su carrera de una preparación, una disciplina excepcional: estudió en el Conservatorio de música de Bucarest y también enseña este preciso arte a otras personas amantes de las experiencias sonoras. Con una carrera excepcional, ha logrado posicionarse en una escena independiente impresionante.
Este año está lanzando un sencillo rítmico y vibrante con elementos electrónicos; está buscando encontrar ese pequeño balance entre los traductores del transporte y la manera tan accesible de la música comercial. De esta manera logra combinar dos elementos interesantes en uno solo: «Cruel Intentions», una canción ya disponible en todas las plataformas digitales con un sonido atrevido y colorido, buscando con sus elementos electrónicos ser adaptable y completamente extrovertida. Su voz iluminada y onírica busca la parte exótica de la música para encontrarse con lo estimulante e inspirador de este género.
El paralelismo de estos géneros crea un balance musical bastante fluido que combina elementos electrónicos y ritmos pegajosos con melodías optimistas. También estas canciones son altamente agradables al oído y buscan con esta producción pulida conectar con una audiencia ilusionante y cautiva por crear una conexión más persuasiva con una audiencia juvenil que enfatiza en este estilo vibrante y profesional.
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