¿Mexicanos cantando en japonés? ¡Sí! O bueno al parecer el productor es el mexicano Gastón y probablemente hay una vocalista femenina que fue la responsable de agregar las voces en dicho idioma. O tal vez sea él, las posibilidades son infinitas hoy en día. Interesante placa que raya en lo kitsch, y coquetea abiertamente con el city pop ochentero (obviamente japonés) que tanta popularidad ha ganado en últimos tiempos. Lo cual implica el uso de pianos disco, bajos disco y baterías…disco.
Bonitas voces armonizadas, sobre una estructura musical variada y entretenida, que gracias a los efectos retro muy bien logrados se evoca esa atmósfera urbana y lluviosa mientras se mira por la ventana con un libro abierto sobre el regazo. La placa no tiene desperdicio, vibrante y melancólica. Agridulce y nostálgica. El filtro que se agrega al momento del solo de saxofón embona perfectamente con la estética que de manera intencionada busca esta producción. Buen uso de sutiles disonancias que aportan un carácter cercano al jazz fusión. ¿La letra? No tengo la más mínima idea. La música es lo suficientemente disfrutable.
Recomendable
para otakus de medio tiempo y fans
del pop bien hecho.
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